Fuente: HagaseLaMusica
Según distintas investigaciones, Ludwig van Beethoven podría haber compuesto algunas de sus más grandes obras maestras siguiendo su irregular latido del corazón.
Los cambios repentinos e inesperados en el ritmo y las claves de la música parecen coincidir con los efectos de la arritmia cardíaca, una enfermedad que al parecer el compositor alemán padecía. Aunque reconocen que puede ser la sola manifestación de su gran genio hay una gran posibilidad de que sean piezas de su corazón latiendo, literalmente.
Más que cambios fisiológicos, yo diría que es más probable que los cambios de ritmo en Beethoven se debieran a la voluntad de no ser monolítico en sus creaciones; a la voluntad de imprimir nueva y renovada fuerza creativa cambiante a lo que estuviera componiendo. Y quizás al intento también voluntarioso de quitarle el exceso de vigor, a veces, a su música.